10 Errores Comunes que Están Dañando tu PS5 Slim sin Saberlo

Si tienes una PS5 Slim y quieres que te dure muche tiempo, este artículo es para ti. Muchos gamers como tú cometen errores pequeños —casi imperceptibles— que con el tiempo terminan afectando seriamente la consola: fallos de ventilación, sobrecalentamiento, desgaste del lector, problemas en el DualSense… y lo peor es que la mayoría ni siquiera sabe que lo está haciendo mal.

En esta guía te voy a mostrar los 10 errores comunes que están dañando tu PS5 Slim sin que te des cuenta, pero lo más importante: cómo evitarlos de forma simple y efectiva. Porque cuidar tu consola no debería ser un misterio técnico, sino una práctica inteligente si quieres sacarle el máximo rendimiento sin comprometer su vida útil.

1. Mala ubicación: así estás asfixiando tu PS5 Slim sin saberlo

Uno de los errores más frecuentes —y peligrosos— es colocar la PS5 Slim sobre alfombras, dentro de estantes cerrados o pegada a la pared. Aunque parezca inofensivo, esto bloquea el flujo de aire y hace que la consola se caliente más de lo normal. Si tu PS5 no puede ventilarse bien, el calor se acumula y empieza a desgastar los componentes internos, especialmente el sistema de refrigeración.

Lo ideal es dejar al menos 10 cm de espacio libre a su alrededor y, si puedes, manténla en posición horizontal para mejorar el flujo de aire. Así le das espacio para respirar y reducirás tanto la temperatura como el ruido del ventilador.

¿Sientes que tu PS5 se calienta más de lo normal? Entonces no te pierdas esta guía con los 5 errores que están sobrecalentando tu consola y cómo solucionarlos: Tu PS5 se sobrecalienta por esto: 5 errores que nadie te cuenta

2. Acumulación de polvo: el enemigo silencioso

El polvo es uno de los enemigos más ignorados, pero más peligrosos para tu consola. Se acumula poco a poco en las rejillas de ventilación, tapa los conductos de aire y obliga a los ventiladores a trabajar el doble. ¿El resultado? Una PS5 que suena como turbina y se calienta más rápido de lo normal.

Si nunca la limpias, estás acortando su vida útil sin darte cuenta. Por eso te recomiendo usar una brocha de cerdas suaves o aire comprimido cada 2 o 3 meses. Y si te animas a ir más allá, quitar las tapas y limpiar por dentro es más fácil de lo que parece (sin perder la garantía).

¿No sabes por dónde empezar? Aquí tienes una guía paso a paso, segura y sin riesgos:
Cómo limpiar tu PS5 Slim paso a paso: Sin dañarla

3. Usar cables genéricos o cargadores de celular

Muchos gamers usan cables USB-C baratos o cargadores de celular sin protección.
Esto puede causar sobrecalentamiento en el DualSense o incluso dañar el puerto de carga.
Evita riesgos: usa siempre cables originales o certificados para PS5 y conectores con protección de voltaje.

4. Dejar discos físicos dentro de la PS5 Slim

Si tu PS5 es la versión con lector de discos y sueles dejar el juego insertado por días, aunque no lo estés usando, estás forzando innecesariamente el mecanismo. El lector óptico permanece activo en segundo plano, generando desgaste continuo incluso sin que estés jugando.

Con el tiempo, esto puede provocar fallos en la lectura o daños en el sistema de expulsión. ¿La solución? Saca el disco siempre que no vayas a usarlo por un buen rato. Es un hábito simple que puede alargar años la vida útil del lector. Tu PS5 te lo va a agradecer.

5. No actualizar el mando DualSense

Muchos jugadores no saben que el DualSense también recibe actualizaciones, y no hacerlo puede generar problemas como:

• Baja duración de batería, incluso sin uso intenso.
• Fallos en la retroalimentación háptica y los gatillos adaptativos.
• Errores de conexión o respuesta lenta durante el juego.

Actualizarlo es fácil y solo toma un minuto:

• Conecta el mando a tu PS5 usando el cable USB-C.
• Ve a Configuración > Accesorios > Control inalámbrico.
• Pulsa en Actualizar y espera a que finalice el proceso.

Haz esto cada vez que haya una nueva versión. Tu mando funcionará mejor, durará más y evitarás errores molestos en medio de tus partidas.

6. Usar regletas comunes sin protección

Una regleta simple no protege tu PS5 de subidas de voltaje. Si hay una descarga, podrías perder tu consola en segundos.
Lo ideal es usar una regleta con supresor de picos o protector contra sobretensión, y si puedes, con filtro EMI o RFI. No escatimes en esto.

7. Apagar mal la tu PS5 Slim

Muchas gamers todavía apagan su PS5 de la forma incorrecta: desconectándola directamente del enchufe o presionando el botón sin pasar por el menú. Esto no solo es un mal hábito, es una receta para el desastre.

Cuando apagas así la consola, puedes corromper la base de datos, afectar el sistema operativo e incluso causar errores internos difíciles de solucionar. Lo correcto siempre será apagarla desde el menú oficial, esperar a que se apague completamente y, solo si lo necesitas, desenchufarla después. Unos segundos de paciencia pueden ahorrarte un gran dolor de cabeza más adelante.

8. Jugar en habitaciones con calor extremo

Si tu habitación supera los 30 °C, la PS5 trabaja al límite. Esto afecta el rendimiento y acelera el desgaste de los ventiladores.
¿Mi consejo? Ventila bien el espacio. Un ventilador cerca de la consola o una base refrigerada puede marcar la diferencia.

9. Dejarla en modo reposo todo el tiempo

El modo reposo puede parecer cómodo, pero no es lo mismo que apagar tu PS5. Cuando dejas la consola en reposo todo el tiempo, el sistema sigue funcionando parcialmente, y eso significa consumo constante, riesgo de errores si hay un corte de energía y mayor desgaste interno.

En mi experiencia personal, he tenido varios problemas dejando la consola en reposo. Algunos creen que exagero, pero sé lo que viví: juegos que no arrancaban, fallos con el almacenamiento y errores al encender.

Por eso, mi recomendación es que uses el modo reposo solo si estás descargando algo o vas a volver pronto. Si no, apágala completamente. Te vas a evitar más de un susto.

10. 💾 Usar discos externos no compatibles

No todos los discos duros externos están diseñados para trabajar con juegos. Algunos tienen una velocidad de lectura muy baja o simplemente no cumplen con los requisitos mínimos que necesita la PS5 para ejecutar títulos correctamente. ¿El resultado? Cuellos de botella, errores de lectura, pantallas negras o tiempos de carga eternos.

Si vas a usar almacenamiento externo, asegúrate de que sea un SSD con conexión USB 3.0 o superior, y con buena tasa de transferencia. Nada de discos viejos, baratos o reciclados. Y si lo que quieres es expandir el almacenamiento a lo grande, lo mejor será instalar un SSD interno compatible.

📦 ¿No sabes cuál te conviene más? Te dejo esta guía donde comparo ambas opciones y te explico cuál elegir según tu presupuesto y necesidad: ¿SSD Interno o Externo para tu PS5 Slim? Elige Bien

🧠 Conclusión: Tu PS5 Slim no es indestructible

La PS5 Slim es una consola increíble, pero no es a prueba de errores. Muchos de estos fallos son tan comunes que los cometemos sin darnos cuenta… hasta que algo deja de funcionar. Lo bueno es que, con simples cambios en tus hábitos, puedes evitar sobrecalentamientos, daños internos, pérdida de datos y errores molestos.

No se trata de ser un técnico, sino de tener sentido común y conocer tu consola. Si llegaste hasta aquí, ya tienes una ventaja enorme frente a muchos usuarios.

Nos vemos en el próximo artículo, Máquinas. ¡Cuida tu consola como cuidas tus victorias!